HISTORIAS DE ÉXITO

Perder peso siempre ha sido un reto para mí. Lo he probado todo. Ya sabe de qué hablo: dieta, ejercicio y pastillas. Todo esto o no funcionaba o no duraba, incluso aunque siguiera la dieta minuciosamente. Como era muy difícil, al final fracasé. Sabía que necesitaba ayuda para controlar mi apetito, pero las pastillas para adelgazar no funcionan muy bien. Cuando me enteré del éxito de los balones, quise saber si me serviría. Estaban probando un nuevo balón ajustable en el hospital universitario que está cerca de mi casa. Mi médico me sugirió que lo probara. Los primeros días no fueron tan malos como yo esperaba. Tuve náuseas y vómitos, pero conseguí superarlo. Después de eso, todo estuvo mucho mejor. Mi apetito disminuyó y perdí peso de forma constante. Después de unos 4 meses y medio mi apetito comenzó a aumentar. Mi médico me recomendó añadir más líquido al balón. Volví al hospital para un procedimiento rápido. Desde entonces he perdido otros 7 kg. Mi vida ha cambiado. Hasta ahora, estoy muy contenta con los resultados obtenidos. Me sentí muy orgullosa cuando mis amistades me dijeron que estoy estupenda. La ropa pasó a quedarme tan ancha que tuve que salir a comprar ropa nueva. Lo más importante de todo es que me siento muy bien». Seguimiento de 3 años: «Me va muy bien. He perdido otros 7 kg desde que me quitaron el balón. El año en el que tuve el tratamiento con el balón me ayudó mucho a cambiar mis hábitos alimenticios"